Esta ciudad es mágica. Según he empezado a andar hoy por sus calles y avenidas, me he dado cuenta de que es uno de los sitios más bonitos que existen en nuestra geografía.
La ciudad está elegantemente diseñada, con amplias zonas peatonales y un casco viejo con un trazado casi de campamento militar. Todos los edificios y rincones destilan ese olor "belle epoque" que te hacen revivir y pensar los geniales momentos que ha tenido que vivir.
No hay que olvidarse, que esa parte vieja está repleta de tascas con "pintxos" geniales que alimentanque da gusto.
Lo mejor, la bahía de la concha y todo lo que la rodea.
Para muestra, un botón, conservan un carrusel antiquísimo que tiene un sabor genial. Por 1,70€ puedes subirte y galopar al lado de la playa de la concha en un caballo de largas,brillantes y duras crines ( que mal suena esto...).
Al hilo de esto he encontrado una historia que no se si será cierta pero que desde luego, es bonita.
El caso es que es todo un placer estar por aquí, aunque sea de trabajo.
Os dejo una foto tomada hace 15 minutos desde el hotel en el que estoy, un pequeño hotel en la montaña de Igeldo que está genial ( http://www.lekueder.com/ su web no le hace justicia ) y además tiene wifi¡¡
Portarse bien ;)
Portarse bien ;)